¿Te gusta el contenido de mi blog? Ayudame a seguir manteniéndolo

Invitame un café en cafecito.app
Por el momento, sólo podés invitar cafecitos si sos de Argentina. Ahora sí, lee tranquilo.

lunes, 30 de noviembre de 2015

“El lápiz mágico” (cuento)


Hace bastante que no abandonaba tanto mi querido blog.

Estaba vez pasó casi un mes desde mi última publicación. Tengo mis excusas, aunque nadie me las exija. Me casé, en un fin de semana de casamiento al mejor estilo How I Met Your Mother, me fui de Luna de Miel al caribe y recién ahora retomo la insípida rutina de la que somos tristemente esclavos.

Vuelvo a la carga con un nuevo cuento de mi autoría, en un año muy lindo en cuanto a la escritura. Mi segunda novela salió tercera en un premio internacional español (ya ampliaré detalles) y un relato propio se hizo con un segundo premio en un certamen nacional; otro gran orgullo.

En esta oportunidad les comparto un panegírico delirante (y con referencias cinéfilas para el lector más atento) que espero disfruten leyendo tanto como yo disfruté redactándolo. 

El lápiz mágico”, ahí va:


***

“El lápiz mágico”

Amigos, compañeros, gente de los medios… estamos aquí reunidos ante una circunstancia lúgubre que hoy nos amarga todo sabor. Lápiz fue algo inconmensurable, tan colmado de vida… el estandarte de la risa en cualquier reunión. Un alma noble que comenzó desde la nada, como parte de un gran bloque de cedro español.

Su ciudad natal, Ferrol, nunca lo conformó. Desde el instante en el que se dividieron las tablitas a las que se le hacen las hendiduras de las minas, Lápiz supo que estaba predestinado a algo grandioso. No más se le aplicó pegamento en los surcos y se le colocó la mina de grafito, resolvió dedicar su existencia al séptimo arte, a la gran pantalla. En el preciso minuto en el que Lápiz fue afilado y pasó el control de calidad, abandonó la fábrica para inscribirse en el Sindicato de Utilería.


El atrezzo en el cine nunca es un insípido ornamento. Ambienta toda escena y profundiza la producción audiovisual. La utilería deja de ser un objeto para convertirse en un símbolo transmisor de sentimientos que nos avienta pedazos de ficción en nuestros rostros. Lápiz comprendía esta realidad, y por eso consagró todos sus esfuerzos para ingresar en el ambiente.

Sus principios fueron modestos. Participó como útil escolar en algunas publicidades españolas y en películas clase “B”. Recuerdo haberle preguntado una vez. Me dijo: “La competencia era feroz. Hay mucha utilería talentosa y poco trabajo”.


Su vida dio un vuelco cuando el Director de Escenografía Charlie Brooke vio algo en él y lo sumó al elenco de “El lápiz del carpintero”, basada en la novela de Rivas, que finalmente se estrenó en el 2003.  A partir de ahí, cualquier aparición de Lápiz se transformó en un manantial de éxito.

Se mudó a Hollywood, la meca de la industria cinematográfica. Interpretó a la pluma que inspira a Jonnhy Depp en “La ventana secreta”, fue el lápiz embrujado de “Actividad Paranormal”, trabajó con Christopher Nolan en la aclamada “El Maquinista” (2004) y le llegó el premio de la Academia por “Mejor Utilería en Documental” por “Steal a Pencil for Me” (2007), donde se destacó como el accesorio más conmovedor y emotivo de la historia del cine.

Un punto clave en su carrera, que todos recordamos con cariño, le llegó en el 2008, nuevamente en compañía de Nolan. ¡Todos saben a qué me refiero! Los mafiosos están reunidos en una videoconferencia cuando el Guasón hace su aparición en escena. “¿Qué tal un truco de magia?”, dice y clava a nuestro homenajeado a la mesa con la punta hacia arriba, “voy a desaparecer este lápiz”. Y entonces sucede ese momento increíble: uno de los hombres se levanta y va hacia él; en un solo movimiento Heath Ledger (en ese rol enorme que lo inmortalizó) golpea la cabeza contra la mesa, haciendo desaparecer a Lápiz dentro del ojo. “¡Taa-raaa! ¡Ya no está!”, concluye. Y es así… es así. Tristemente, Lápiz –como en ese efecto visual impresionante que protagonizó– ya no está entre nosotros.

Su fin, la tragedia, vino de la mano de un director de cine negligente e irrespetuoso. El lugar: set donde se estaba filmando “Pinocchio”, la nueva y oscura película de Guillermo del Toro. El mexicano –notable por su contextura más bien robusta– hambriento, con una hamburguesa grasosa entre sus dedos, se sentó descuidadamente en el asiento en el cuál Lápiz reposaba.

Nadie pudo detenerlo: partió a Lápiz en dos.

Ante tal absurdo, todos nos mantuvimos firmes, estupefactos. En medio de un silencio infamante, Del Toro limpió la comisura de sus labios con una servilleta. Sólo se percató del lapicidio cuando su abogado llegó corriendo al set y lo instó a retirarse del lugar sin decir una palabra.

La familia de Lápiz no piensa levantar cargos contra el director. Un útil de escritura conoce los riesgos de alcanzar las máximas elevaciones de la fama hollywoodense, es consciente de las reglas del juego. El rodaje de la película, en la cual Lápiz habría tenido un rol protagónico, quedó suspendido hasta nuevo aviso.

Doy final a este panegírico dejando en el ataúd una resma de hojas blancas tamaño A4; sus favoritas. Para que Lápiz pueda seguir creando, inventando. Para que pueda continuar soñando. Antes de que retornemos a la insulsa peregrinación por esta vida, tomémonos un rato para admitir una verdad: ninguno de nosotros está realmente triste; no hace falta. Todos sabemos que allí, en aquel cajón de caoba y rodeado por velos, Lápiz todavía sonríe.

¡Gracias, Lápiz querido!

Q.E.P.D., 1987- 2015.

***

………………………………………………………………………………………………….


………………………………………………………………………………………………….

 Podés seguir las nuevas notas y novedades (además de humor y críticas de cine) en mi fan—page: http://www.facebook.com/sivorilucianoSi te gustó, ¡compartilo o dejá un comentario!

8 comentarios:

  1. Muy bueno Lu ! Que va ser... asi es la vida ! Hasta la del lapiz ! Claramente tenia al trazo contado... saludos genio !

    ResponderEliminar
  2. Como te comenté en el taller, me encantó. Es muy divertido y bizarro. En cuanto a lo demás, supongo que éste es el lugar más adecuado para felicitarte, y pienso que tu señora es muy afortunada, porque lo que respecta a mí, todavía estoy esperando a que el Sr. Denise me dé el ok para pedir turno en el civil D:

    Saludos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡¡Gracias!! No seas dura con Sr. Denise, cada pareja tiene sus tiempos...
      Que quede entre nos, pero estás en el top de seguidoras de mi blog favoritas =P

      Eliminar
  3. Primero: felicitaciones por el casamiento
    Segundo: felicitaciones por el cuento, ¡es genial! Por un momento me asusté con lo de Del Toro, creí que el desenlace sería otro, jeje
    Yo también sufro a veces la pérdida de algún lápiz, óleo o pinceles. Pero así es esto, están diseñados para dejar la huella de su paso por este mundo y luego morir.

    Abrazo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jaja, es un cuento medio pelotudo, pero me divertí escribiéndolo. Es bastante experimental, si se quiere... ¡gracias por el saludo de casamiento!

      Eliminar
  4. Muy bueno. Como todos los tuyos felicitaciones sos un genio .iterario

    ResponderEliminar
  5. Muy bueno. Como todos los tuyos felicitaciones sos un genio .iterario

    ResponderEliminar

Quizás te pueda llegar a interesar...